Algunos colores de Rafa Sendín, 2022

7 botes de pintura.
4 botes de pintura plástica int./ext. B03 IRC 750ML. base D. Servicolor y tintes. Mas otros tres botes de Base fachadas acrílica 100% 750ML. Base D. Servicolor y tintes).
Medidas variables.

Partitura de la ocurrencia:
200220
Ir a una tienda de pinturas, de esas que te fabrican el color que solicitas, y pedirles que identifique con un colorímetro o espectrofotómetro, el color de las distintas partes de mi cuerpo, catalogándolas debidamente, cada parte del cuerpo con el color detectado. Y fabricar, de cada color obtenido, medio litro de pintura. El conjunto de los botes, y el estudio cromático formará la obra, así como la acción en la tienda de pinturas.
Título: The Friendliest of colors artista in Europe.

Ocurrencia surgida durante la lectura del libro: Agotar la danza. André Lepecki. “Un empeño arriesgado, un comienzo arriesgado, un emparejamiento arriesgado para enmarcar un modo muy específico por parte de un artista negro americano cuyo lema comercial proclama (en relación a William Pope L.): <<The friendliest Black Artist in America ©>> (El artista negro más amistoso de América). Danza del tropiezo. Las reptaciones de William Pope L. Pág.:159-160.
Y al recordarme una ocurrencia, generada en torno al trabajo, relacionado con el racismo, de Adrian Piper (Adrian Piper. Desde 1965. MACBA, Actar, 2003).

Para la interpretación en NNNN, el 5 de octubre, aprovechando la compra de materiales para la interpretación de otra ocurrencia Sin marco, en Papelhogar, calle Humilladero 20. Al ver que tenían muchos productos de pintura a la venta, le pregunté a la dependienta que me atendía que, si tenían el sistema de medición y fabricación de color a la carta, me contestó que sí. Entonces yo le expliqué la ocurrencia, advirtiéndole de antemano, de lo pelegrino de mi propósito. Para mi sorpresa se mostró de lo más predispuesta a participar. Se fue a buscar el colorímetro y realizamos varias pruebas sobre mi brazo. Desde un principio me advirtió que el sistema estaba pensado para detectar colores planos, que sobre la piel daría lecturas imprecisas. Le dije que no me importaba la imprecisión, que de alguna forma es lo que buscaba. Ella, para que saliera mejor todo, llamó a la persona que habitualmente lo manejaba. También le expliqué a este la ocurrencia, y del mismo modo se ofreció a participar, como si estuviesen acostumbrados a este tipo de ideas. Me quité la camiseta y procedimos a la medición. Yo ponía mi cuerpo, las mediciones se realizaron de la cabeza, brazos derecho e izquierdo, pectoral, piernas izquierda y derecha. El dependiente encargado del manejo del colorímetro, haciendo gala de su profesionalidad, lo calibraba tras cada nueva medición. Yo realicé alguna fotografía del colorímetro, con los datos de las mediciones. Y solicité a la dependienta que me sacara fotografías durante las distintas mediciones, para lo cual le dejé mi cámara. Ella también anotaba los distintos códigos resultantes, y los identificaba con la parte del cuerpo correspondiente. Una vez concluido este proceso, les pregunté que si podían incluir en el etiquetado habitual que utilizaban, mi nombre y la parte del cuerpo a la que pertenecía la medición del bote en cuestión. Me contestaron que sin problemas. Por la tarde cuando fui a recoger los botes, me di cuenta de que esta información la habían escrito con rotulado. Yo lo quería como ellos lo hacían habitualmente, y así lo acepte. Una vez los botes en el espacio los situé en el suelo junto a la pared, del sitio de donde ya no se movieron, hasta que el sábado. Entre Ramón y Raúl le construyeron y colocaron una estantería, compuesta por, un trozo de tabla reciclado del taller de Ramón, y dos escuadras de acero blanco. La mañana del sábado, decidí, para facilitar su lectura, añadirles, a cada bote, una etiqueta adhesiva blanca, con una pincelada del color que contenía cada uno en su interior. Después, hablando sobre esta ocurrencia con Blanca (marcablanca) y Ramón, con el que estaba elaborando la hoja de sala, después de leerles completa la partitura de esta ocurrencia, incluido el título: The Friendliest of colors artista in Europe, a Blanca le parecía que, dicho título podría ser problemático, considerado, incluso, por determinados sectores de población, como racista u ofensivo. A mí no me lo parecía, y así se lo hice saber. Pero el domingo, movido por los comentarios de Blanca, y pensando que ella tiene más experiencias en estos temas, me decidí a cambiar el título.

Some Colours by Rafa Sendín, 2022.

7 paint boats.
(4 bottles of plastic paint inside/outside B03 IRC 750ML. Base D. Servicolor and dyes. But other three boats of Base acrylic facades 100% 750ML. Base D. Servicolor and dyes).
Variable measurements.

Score of the “ocurrencia”:
200220
Go to a paint shop, one of those that make the colour you ask for, and ask them to identify with a colorimeter or spectrophotometer, the colour of the different parts of my body, cataloguing them properly, each part of the body with the detected colour. And to make, from each colour obtained, half a litre of paint. The whole of the pots and the chromatic study will form the work, as well as the action in the paint shop.
Title: The Friendliest of colors artist in Europe.

“Ocurrencia” that arose during the reading of the book: Exhausting the dance. André Lepecki. “A risky endeavour, a risky beginning, a risky pairing to frame a very specific mode by a black American artist whose commercial slogan proclaims (in relation to William Pope L.): <<The friendliest Black Artist in America ©>>. Stumble Dance. The reptations of William Pope L. p. 159-160.
And by reminding me of a “ocurrencia”, generated around the work, related to racism, of Adrian Piper (Adrian Piper. Since 1965. MACBA, Actar, 2003).

For the performance at NNNN, on 5 October, while buying materials for the performance of another “ocurrencia”. Sin marco, I went to Papelhogar, calle Humilladero 20. Seeing that they had many paint products on sale, I asked the shop assistant if they had the system for measuring and manufacturing colour à la carte, and she replied that they did. I then explained the occurrence to her, warning her beforehand of the unfortunate nature of my intention. To my surprise, she was more than willing to participate. She went to get the colourimeter and we carried out several tests on my arm. From the beginning she warned me that the system was designed to detect flat colours, that on the skin it would give inaccurate readings. I told her that I didn’t mind the inaccuracy, that somehow that’s what I was looking for. She, in order to make it all work out better, called the person who usually handled it. I also explained the occurrence to him, and he offered to participate, as if they were used to this kind of ideas. I took off my T-shirt and we proceeded to the measurement. I put my body on, the measurements were taken of the head, right and left arms, chest, left and right legs. The clerk in charge of the colourimeter, showing his professionalism, calibrated it after each new measurement. I took some photographs of the colourimeter, with the data of the measurements. And I asked the shop assistant to take pictures of me during the different measurements, for which I left my camera with her. She also wrote down the different resulting codes, and identified them with the corresponding body part. Once this process was completed, I asked them if they could include my name and the body part to which the measurement of the canister in question belonged in the usual labelling they used. They replied that it was no problem. In the afternoon when I went to collect the bottles, I realised that this information had been written on the label. I wanted it as they usually did, and so I accepted it. Once the canisters were in the space, I placed them on the floor next to the wall, from where they did not move until Saturday. Ramón and Raúl built and placed a shelf for them, consisting of a piece of recycled board from Ramón’s workshop, and two white steel brackets. On Saturday morning, I decided, to make it easier to read, to add a white adhesive label to each pot, with a brushstroke of the colour that each one contained inside. After talking about this idea with Blanca (marcablanca) and Ramón, with whom I was preparing the room sheet, after reading them the full score of this idea, including the title: The Friendliest of colors artist in Europe, it seemed to Blanca that this title could be problematic, even considered, by certain sectors of the population, as racist or offensive. I didn’t think so, and I let her know so. But on Sunday, moved by Blanca’s comments, and thinking that she has more experience in these matters, I decided to change the title.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

BASE FACHADAS ACRILICA 100% 750ML.BASE D
SERVICOLOR Y TINTES NOVA Y063
ROSTRO.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

BASE FACHADAS ACRILICA100% 750ML.BASE D
SERVICOLOR Y TINTES NOVA H115
PECTORAL.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

BASE FACHADAS ACRILICA 100% 750ML.BASE D
SERVICOLOR Y TINTES NCS 4020-Y50R
ESPALDA.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

PLASTICA INT/EXT B03 IRC 750 base D
SERVICOLOR Y TINTES NCS 4020-Y40R
BRAZO IZQUIERDO.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

PLASTICA INT/EXT B03 IRC 750 base D
SERVICOLOR Y TINTES NOVA Y091
BRAZO DERECHO. 

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

PLASTICA INT/EXT B03 IRC 750 base D
SERVICOLOR Y TINTES NOVA Y071
PIERNA IZQUIERDA.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

PLASTICA INT/EXT B03 IRC 750 base D
SERVICOLOR Y TINTES NOVA Y039
PIERNA DERECHA. 

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

Detalles de la exposición.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

Proceso de medición del color en Papelhogar.

Algunos colores de Rafa Sendín, 2022.

Foto en la exposición Nadie, Nunca, Nada, No. Madrid